Fiestas clandestinas en Santa Cruz: «Déjense de joder, estamos perdiendo vecinos»

El director del Hospital Zonal de Caleta Olivia, Gerardo Romaní apuntó contra quienes cada fin de semana protagonizan fiestas clandestinas. Y recordó que son consideradas como principal foco de contagio.
La tajante expresión fue formulada por el director del Hospital Zonal de Caleta Olivia, Gerardo Romaní, en clara referencia a gente que sigue protagonizando fiestas clandestinas, las cuales están consideradas entre los principales focos de contagios del COVID 19, motivando que muchos vecinos queden internados en terapia intensiva y pocos sobrevivan.
El médico comenzó a mostrarse más expeditivo en sus expresiones públicas al evidenciar que su inicial mensaje a la comunidad, cuando pedía “por favor” extremar cuidados de bioseguridad contra pandemia, las juntadas y fiestas clandestinas -protagonizadas mayoritariamente por jóvenes- no solo continuaron sino que se incrementaron los fines de semana.
Para refrendar sus declaraciones formuladas indistintamente a programas radiales de La Vanguardia Noticias, FM San Jorge y también a El Patagónico, el referente del COE local citó que las tres salas de terapia intensiva que posee el Hospital Zonal, con un total de 22 camas, nuevamente están punto de colapsar, precisando que hasta el martes la ocupación era del 80 %.
De allí que no solo pidió a los padres de los jóvenes que asisten a fiestas clandestinas que asuman responsabilidad y éstos últimos les trasmitió un lacerante mensaje: “déjense de joder porque estamos perdiendo vecinos en Caleta” y “esto no es una joda”, ya que hasta el momento fallecieron 181 vecinos a causa de la pandemia, no solo adultos mayores sino también personas muy jóvenes.

Resaltó además que si bien Caleta Olivia sigue siendo considerada zona de riesgo medio relacionada a su cantidad de habitantes, igualmente se viene detectando un promedio de treinta casos positivos diarios del virus.
Esto hace que esté ubicada en el color amarillo del semáforo epidemiológico que reporta el Ministerio de Salud, pero en el Hospital Zonal, por la gran ocupación de camas en sus terapias intensivas hay un semáforo rojo.
Citó además que un paciente que es internado en una de esas salas permanece allí entre 15 y 30 días “dependiendo del comportamiento del virus y de las variantes” de las cuales ya está comprobado que circulan tres cepas denominadas Andina, Manas y Reino Unido y se sospecha que también puede haber ingresado la que surgió en Río de Janeiro.